domingo, 6 de junio de 2010
Amor 24 horas, sin pausas para la publicidad.
Si enciendo el televisor se despliega ante mi una amplia gama de productos que escoger. Todos ellos van ligados a un ídolo, a algo que nos ayude a convencernos de que esa es la mejor opción. Así como una actriz nos enseña productos de belleza y nos promete ser tan guapas como ella; un cantante nos ofrece una colonia para tener tanto éxito como él; una modelo promociona un gimnasio que te convertirá en una diosa. El amor me vino anunciado contigo, en alta resolución y a 70 pulgadas. Me dijo: si le quieres serás feliz. Y me lo creí. Y acerté.